Considerado “The temple of connoisseurship” según Jancis Robinson, el mejor bar de vinos del mundo por The Wall Street Journal, y uno de los 5 mejores para practicar maridaje por la revista Food & Wine.
Monvínic abrió sus puertas para fomentar el universo del vino con rigor y respeto, pero siempre en un entorno natural, desinhibido, festivo y amigable. Ofrece una cocina a vista con una mesa del chef (con reserva hasta 6 personas), y un espacio culinario luminoso, diáfano y versátil que se puede dividir en varias zonas privadas (14, 26, 40 ó 60 personas).
En Monvínic confluyen un bar de vinos, un espacio culinario, un aula para catas y conferencias, una terraza interior con jardín vertical, una mesa del chef, una sala privada para 6 personas y una biblioteca para 10 personas, y cómo no, una extraordinaria bodega que actúa como nexo de unión entre todos estos lugares y en la que hallan su hogar vinos de los cinco continentes.
El espacio culinario, bajo la batuta de Ariadna Julian, presenta una cocina de raíces profundas con gran respeto por el producto, bajo el sello de la certificación Slow Food-Km 0.